DIARIO DE MONICO:un felino persa

DIARIO DE NONICO: (se omiten los apellidos por discrección, y se avisa que en las fotos se utilizaron técnicas de camuflaje por si fuese reconocido, a petición propia).

                                                                                                     Esa mirada  Persa
                                                                              
Me presento: soy Monico, de reales apellidos.Un felino de una casta especial, llamada Persa,con hermoso pelo amarillo rojizo como la seda y ojos a juego. A petición de una amiga servil reportera ,con la que me comunico de la forma que ha de ser, para que se entienda, telepaticamente, le he dejado que transcriba mis memorias, mi estatus, alegrias y sinsabores.  He sabido de su  gran historial  al servicio felino: ha trabajado para varias castas y ha ayudado a muchos de los mios siendo una fiel escudera y protectora. Esa es la causa de que yo le conceda tal honor . Además ya va siendo hora de que se hable de nuestros pensamientos,  ideas, porque somos unos  gran desconocidos.      
                                             La historia siempre ha sido injusta   igual que la memoria.  Todo se lo adjudican al misterio, que al fin y al cabo, es la ignorancia,  y nadie sabe explicar el porqué siendo lo que fuimos llegamos a donde estamos.

                                                                                        1º- Es un día semanal, lo se porque éste, mi escudero y servidor, se marcha de mañana, que no de amanecida , hace las cosas de siempre sin que yo se lo pida y vuelve más o menos cuando quiere. Mientras me deje mis cositas arregladas, mi arenero limpio, mi plato de comida bien repleto y agua.... El pobre hace lo que puede, pero no se entera.  
                                                                                                                   Ese saber estar
 Le he dado varios maulliditos de los mios para expresarle claramente que quiero, pero no habla mi idioma,  no da para más.Me gusta la  leche, de esa ligera, fresca, con sabor intenso pero nada.Yo si le entiendo pero un rey no tiene porque molestarse en desgarrarse su hermosa garganta en hacer todos esos sonidos y ruidos ensordecedores con muchas palabras para decir lo mismo que yo en dos ronroneos y cuatro miradas. Y seria de desear que varíe de sabores, y que algunos días, sobre todo de esos cuando vuelve y me ha llevado a un lugar, que ya contaré ¡ay madre que agonía¡en que se va de viaje, y luego vuelvo absolutamente    traumatizado    
 , me tiemblan hasta los bigotes de la tensión,  podría traerme esquisiteces de por esos mundos, , que aunque no he viajado si he visto la ventana loca,  donde viven todos los demás tanto seres humanos como los que no lo son , y hacen música, se ríen, al mismo tiempo todos y otras veces hacen ruidos de tristeza,  Alli veo otros colegas mios pero de tamaño enorme, un horror¡¡¡¡¡¡¡¡, yo me quedo calladito para que no me vean, porque si llega alguno de visita por aqui, pobre de mi arenero y de mi platito. Además todo lo comen crudo, sin gracia alguna, son lo que yo llamo, bocazas sin pulir. Yo escucho a veces como un colega mio me comenta desde otro ventanal las que tiene que aguantar con su sierva, que parece que siempre anda en celo y se olvida de sus obligaciones, no le hace sus masajes y encima trae sin previo aviso a personajes de muy poca alcurnia, de esos que no sirven a ninguna casta de felino, andan sueltos, visitan hembras, lo sabemos por el olor que arrastran, y no saben tratar al dueño de la casa como se debe. El mio no es así, se sabe comportar. Salvo algunas ocasiones en las que se convierte en un loco se mira al espejo, se hace fotos, utiliza todo lo que está en la casa y se tapa un ojo con una cuchara, se pone esas pinzas de la ropa en su pelaje y luego se pone un sombrero, unas gafas, sujeta un plátano y desde una esquina del pasillo dispara a desconocidos imaginarios.Creo que se entrena para defenderme. Pero él no es como esos sin dueño, desperdicios de si mismos.  Dan voces, no respetan el trono,los lugares sagrados, marcados. Se tiran sobre su sierva, se espatarran, y en varias ocasiones a punto estuvo más de uno de aplastarlo con tanto revolcón. Yo le digo para animarlo que en mi palacio también tengo mis problemas, pero que es que tiene que pensar que aquella época en la que se nos veneraba como dioses, que es lo que somos, ya pasó, y que tiene que tener en cuenta que al menos en estos tiempos cuando se muere nuestro sirviente principal no nos mandan a submundo de los muertos, apergaminados y tiesos como esculturas. Porque desde allí ya no dabamos ni un maullido más. Algo hemos ganado....(continuará)